Hacerse un «selfie» ya no sólo una moda entre personalidades famosas y urbanitas de a pie, desde hace poco también se ha convertido en un deporte de alto riesgo.

Los jóvenes rusos han creado esta especialidad llamada «Sky walking» o » Roofing» que ya se está extendiendo por toda Europa, cosas de la «Globalización» a través de internet.

Consiste en trepar a pelo por un edificio, por supuesto cuanto más alto mejor, y tocar el cielo con la mano que no sujeta la cámara. Otros van con ayudantes, claro.

Si ya ha habido casos de gente que ha perdido la vida haciéndose una selfie arriesgada, como la pareja que murió cayéndose desde la cornisa de un rascacielos de Nueva York, imaginaros esto.

¿Nos estamos volviendo locos? ¿Es tan importante alcanzar un segundo de gloria para colgarlo en la red y viralizarlo por todo el mundo?

Al final lo que ocurre es que mucho terminar en la web Darwin Awards que premia las muertes accidentales más estúpidas. Bonito epitafio.

La opinión de Soficó. 12 años.

Que tonterias se inventa la gente de ahora para divertirse o incluso morirse. Anda que… podían hacer otra cosa más divertida no sé… ¿Para qué existen las peliculas los videojuegos y todo eso? Pues para entretenerse, para que sea divertido pasar el rato. No molan los deportes de riesgo, no molan nada. Aunque tomemos el aire y estemos en la «naturaleza» probablemente sea lo último que veamos.

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