Si eres madre de una adolescente, prepárate porque el «Hair Chalking» está apunto de eclosionar.

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Una moda que ya se ve en las pasarelas internacionales y que se ha convertido en una de las tendencias más trandy del momento.

Juguetona, sencilla de aplicar y fácil de quitar, se quita con el lavado.

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Es genial para experimentar, tengo que reconocerlo, aunque más de una madre va a tener que ver como su dulce niñita, se va a la calle con estos pelos. Bueno, si sólo es eso puede ser hasta divertido.

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Reflejos rosas, puntas verdes, mechones malvas. Se llevan los tonos pasteles.

Pero para ser verdaderamente vanguardista, hay que elegir una paleta de colores básicos.

En el mercado comienza a haber productos profesionales, como los disponibles en haircolor-chalks.com O la línea de Kevin Murphy, Color Bug.

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Pero lo más fácil para iniciarse son las tizas pastel para artistas.¡Eh! Ya sé lo que estáis pensando pero no. Las tizas de pizarra no valen, no se fijan.

Primero utiliza un serum para hidratar el cabello que vas a tiznar, después humedécelo ligeramente, aplica la tiza y retuerce el pelo ligeramente. Para que termine de fijarse, aplica laca.

Y cuando te canses de tus colores de guerra, lava tu pelo con un champú de PH neutro y después ponte una buena mascarilla hidratante, para que tu cabello no quede dañado o el de tu hija, quién sabe.

¡Hala! a modernizarse.

La opinión de Soficó. 10 años.

Yo no me lo pondría por nada del mundo. Aunque me pagasen un millón de euros y los necesitase mucho.